El experimento de un músico adolescente sugiere que escuchar ritmos binaurales mientras se estudia podría ser más efectivo que melodías de fondo como la música popular de los videojuegos.

Toby Lam, un aspirante a químico y pianista de 14 años, sintió curiosidad por el impacto del sonido en la concentración después de enterarse de que la capacidad de atención ha ido disminuyendo en las últimas décadas. Se preguntó si la música podría ayudar a combatir esta tendencia. Para su experimento, Toby reclutó a 65 participantes para un estudio en línea en el que realizaban una tarea visual sencilla que requería reacciones rápidas.

Un tercio de los participantes trabajó en silencio, otro tercio escuchó el tema icónico de Tetris durante la mitad de la tarea, y el grupo final experimentó ritmos binaurales: tonos ligeramente diferentes reproducidos en cada oído que crean la percepción de un ritmo pulsante.

Los resultados mostraron que aquellos que escuchaban ritmos binaurales superaron a los otros grupos en términos de tiempo de reacción y precisión en la tarea. Curiosamente, los participantes expuestos al tema musical de Tetris obtuvieron las puntuaciones de rendimiento más bajas. Toby cree que estos hallazgos podrían proporcionar información valiosa para los estudiantes que buscan mejores formas de concentrarse mientras estudian.

Aunque intrigantes, Toby reconoce que los resultados del estudio no son estadísticamente definitivos. Esto significa que todavía existe la posibilidad de que las tendencias observadas se deban simplemente a una variación aleatoria. Sin embargo, considera que este es un punto de partida prometedor para futuras investigaciones sobre cómo el sonido influye en la atención.

Toby prevé estudios futuros con tiempos de exposición más largos a la música y sugiere explorar conexiones potenciales entre el entrenamiento musical y los niveles de concentración, ya que sus datos preliminares insinuaron una ventaja para los participantes con inclinaciones musicales.

Para los investigadores jóvenes que recién comienzan, Toby enfatiza el poder de los recursos en línea como Google para ayudar a formular ideas de investigación. También destaca la importancia de la perseverancia y recuerda a los aspirantes a científicos que los contratiempos son una parte inevitable del proceso de aprendizaje. “El fracaso no es un problema”, dice; “Eso es parte del proceso experimental”.